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Mostrando las entradas de 2018

¿Qué es la conmutatividad?

Las fórmulas son modelos científicos y esto tiene profundas consecuencias en filosofía de la lógica, y de su didáctica. Por ejemplo, ¿qué decimos cuando decimos que la conjunción es conmutativa? ¿Qué tipo de hecho es éste? Si uno piensa que lo que dice la conmutación sobre la conjunción es que lo que está a la derecha pudo haber estado a la izquierda , entonces parece ser una ley sobre las fórmulas y no sobre su contenido, en tanto son solamente la fórmulas las que tienen izquierda o derecha, las proposiciones, la información, los hechos, no tienen izquierda y derecha. En el hecho de que Juan es apuesto y simpático, no hay ningún sentido en el que el que sea apuesto esté a su izquierda y el que sea simpático está a la derecha. En el enunciado “Juan es apuesto y simpático”, ahí sí el predicado “apuesto” está a la izquierda y “simpático” está a la derecha. En la fórmula “P&Q”, ahí sí la “P” está a la izquierda del operador “&” y la “Q” a la derecha.   Sin embargo, serí

¿Qué es la filosofía analítica y cómo se distingue de otras tradiciones filosóficas?

En las últimas dos décadas he escrito varios textos sobre qué es la filosofía analítica y cómo se distingue de otras tradiciones filosóficas: 1.  ¿Porqué no quiero ser positivista?  Aquí argumento que la diferencia central entre el positivismo de la filosofía analítica y otras tradiciones – como la hermeneútica, el pensamiento de la diferencia, etc. – depende del temperamento de quienes las practican, en particular, qué tipo de filosofía uno hace depende en gran parte en a qué le tenemos miedo .  Ahí escribo: Estas dos tendencias filosóficas [el positivismo y la hermeneútica y los pensamientos de la diferencia] corresponden a dos miedos fundamentales...: Por un lado, el miedo a la anarquía caótica y, por el otro, el miedo al totalitarismo. Es decir, por un lado, el miedo a una falta de orden social, frente al miedo de un exceso de orden y control... aquellos que temen es al relativismo y el ‘todo se vale’, y los que temen al control y la uniformidad de pensamiento, los

¿Cómo ponerle un buen título a tu texto?

Seleccionar un buen título para tu artículo, libro, plática, etc. es fundamental porque el título es tu primera interfase con tu público, es decir, es lo primero – y muchas veces lo único – que tus lectores sabrán de tu trabajo. Un buen título, por lo tanto, debe ser al mismo tiempo informativo y atractivo . En otras palabras, debe darle información útil y específica al lector sobre el contenido de la plática, libro, etc. No olvides que hoy en día, mucha de la investigación bibliográfica se hace a través de buscadores computacionales, así que es ventajoso ser muy concreto y explícito para llegar a mas posibles lectores. Recuerda que es muy poco probable que un investigador busque un artículo sobre, digamos, “Epistemología”, sino que buscará temas mas específicos, como “epistemología del testimonio” o “epistemología naturalizada”. Helen Eassom (2017) sugiere también evitar frases como “estudios sobre ”, “investigación sobre” o similares que son al mismo tiempo vagas y trivia

4 Entrevistas

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Excelente entrevista por Ernesto Castro Entrevista sobre arte, ciencia y tecnología para el sitio "Vértices" Una taza de café con Jonathan Arellano "Investigación: Relevancia, Pertinencia y Coherencia" Entrevista con Roberto Celaya Figueroa para la serie "Educación Realmente Superior"

La Importancia de la Gramática para la Filosofía

Es un lugar común decir que la claridad es una virtud esencial dentro del texto filosófico de investigación. Desafortunadamente, la oscuridad sigue siendo un problema endémico en nuestra disciplina. La explicación tal vez se deba a un tipo de disociación cognitiva que los psicólogos sociales han llamado el “efecto de justificación del esfuerzo” (Aronson & Mills 1959, Abelson et. al. 2004). Según investigación empírica, los humanos tenemos la tendencia a valorar más aquello que nos cuesta más trabajo, ¡simplemente porque nos cuesta más trabajo! Así como irracionalmente disfrutamos más de un antro si tenemos que pasar antes por la aprobación del cadenero, así solemos valorar más ciertos textos filosóficos por el esfuerzo que nos costó trabajo entenderlos, en vez de por su calidad filosófica. Cuidado. (Sperber 2010) Para garantizar que tu texto sea claro, hay muchas cosas que puedes, y debes hacer. Fundamentalmente, debes conocer bien tus herramientas de comunicación (primordi

Sé siempre generoso

En Septiembre de 2018, Douglas Dowland and Annemarie Pérez publicaron en el Chronicle of Higher Education una serie de recomendaciones para ser un investigador generoso con sus colegas. A continuación parafraseo en español algunos de sus consejo.  Vale la pena mencionar que yo no cumplo con ellos, pero estoy empezando a pensar que debería : Recuerde que ninguna persona puede por sí misma ser un movimiento, pero una persona puede comenzar un movimiento. Deja de perpetuar los abusos "normales" del pasado. No hay excusa para la crueldad en público o en privado. Sé consciente y sé responsable de tu lugar en la jerarquía academia: sé especialmente generoso y paciente con aquellos que se encuentran por debajo de ti en dicha jerarquía: si eres profesor, cuida a tus estudiantes; si tienes titularidad, cuida a los que tienen puestos temporales; si eres estudiante de posgrado, cuida a los de licenciatura; si estás en los últimos años de la licenciatura, cuida a los de los pr

Arte Abstracto y Representación Pictórica

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No es raro en teorías de la representación en estética distinguir entre cuatro tipos de obras según si representan algo concreto u algo abstracto: Tradicionalmente se ha pensado que una teoría pictórica de la representación sólo puede dar cuenta de la representación de entidades concretas pues para que haya semejanza debe haber apariencia y lo abstracto, por definición, no tiene apariencia sensorial. Sin embargo, recientemente se han propuesto dos vías para dar una explicación unificada de los cuatro tipos de obras de arte: una, la que yo favorezco, es postular una teoría general de la representación, donde la versión pictórica sería un caso particular, y sí estaría restringida a la representación de lo concreto. La otra estrategia, que ha propuesto, por ejemplo, Miriam Albor es defender que la semejanza relevante para la representación pictórica es una semejanza de respuesta, es decir, para que una obra represente pictóricamente un objeto o situación, no es tan importante qu

Un mensaje de Douglas Hofstadter (presuntamente)

En facebook encontré el siguiente texto como parte de un mensaje que el filósofo Douglas Hofstadter escribió a un estudiante cuando éste le preguntó sobre la posibilidad de ir a estudiar con él el doctorado. Dado que estamos hablando de facebook , y de un correo personal (publicado en un post no público), no puedo asegurar que Hofstadter realmente lo haya escrito (ni puedo divulgar a quién se lo escribió) pero sí es valioso leerlo: “…cuando los estudiantes son admitidos a [un] programa de [posgrado, comúnmente] deben realizar una serie de estudios rigurosos, que incluye [tanto] cursos obligatorios como optativos. Si a un alumno le va bien en esos cursos, poco a poco irá explorando la posibilidad de trabajar con algun profesor en particular. Debo aclarar que no se puede garantizar desde antes del proceso de admisión que un profesor en específico querrá trabajar con un alumno en específico, ni siquiera después de que el alumno haya llegado y haya empezado a tomar cursos – y ni

Contextualismos No Tradicionales

No hay nada controvertido en señalar que las oraciones no expresan condiciones de verdad por sí mismas, sino solamente cuando son usadas en un contexto (por ello, llamado “contexto de emisión”). El mismo enunciado emitido en diferentes contextos puede expresar diferentes condiciones de verdad, mientras que las mismas condiciones de verdad pueden ser expresadas por diferentes enunciados en diferentes contextos. Si dos enunciados expresan siempre las mismas proposiciones cuando son emitidos en los mismos contextos, se dice que tienen el mismo carácter. Las condiciones de verdaderas son satisfechas o no – y el enunciado correspondiente es verdadero o falso – dependiendo de cómo es el mundo. Para que se satisfagan estas condiciones a veces es necesario que se den hechos en circunstancias o tiempos distintos a los de emisión. Por ejemplo, si hoy afirmo que “mañana lloverá”, el contexto de emisión es hoy, pero para que lo que afirmé sea verdadero es necesario que llueva mañana, no hoy.

Sensibilidad contextual mas allá de los deícticos

Los deícticos son ejemplos muy sencillos de expresiones sensibles al contexto pues su significado convencional nos sirve de una regla clara que nos dice cómo identificar su referente a partir de elementos fácilmente identificables del contexto: de quién habla, a quién se dirige, en qué momento, dónde lo hace y – para lidiar con demostrativos y otros deícticos impuros – las intenciones referenciales del hablante. Nótese que, como ha señalado Perry (1997) a excepción de estas intenciones referenciales, todos los otros elementos existen automáticamente cada vez que se emite un enunciado, en otras palabras, siempre que se emite un enunciado, lo hace alguien, dirigido   a alguien, en un momento y en un lugar determinados. A estos elementos se les conoce como el “ contexto estrecho ” de una emisión. Sin embargo, es claro que no todas las expresiones sensibles al contexto satisfacen estos dos constreñimientos. Algunas dependen del contexto de una manera que no puede expresarse en u

Dos historias

Cuando era muy pequeña, cada domingo, después de misa, a mi novia la llevaba su madre a visitar a sus abuelos, los cuales vivían solos en una pequeña casa de piedra y teja. Como no tenían electricidad, la casa era muy oscura y tétrica para mi novia. Además, le servían siempre de comer sopa y, al abuelo, caldo de pollo. Para cuando llegaban a la casa de los abuelos, mi novia estaba ya en el segundo berrinche. El primero, porque la llevaban a fuerza a misa, y el segundo porque la llevaban a fuerza a ver a los abuelos. No quería ni saludarlos. Cuando recién me mudé a los Estados Unidos, compartí departamento con una pianista que se especializaba en acompañar cantantes. Así me hice de dos muy buenas amigas que estudiaban ópera. De casualidad, ambas se llamaban "Amanda" (aunque a una de ellas le decíamos "Amy" y a la otra su hermana – pero sólo ella, por lo que yo sé – le decía “Mandy”). Compartí apartamento con una de ellas por unos meses. La otra, aunque terminó

Merricks y los vicios de la metafísica analítica

A veces, pienso que la metafísica se merece su mala fama. O tal vez, mas bien son los filósofos que se dedican a la metafísica los que se merecen la mala fama. Pasan sus vidas tratando de reducir unos objetos y fenómenos a otros. Pero ahora, después de siglos de reducción, veo difícil que lleguemos a una reducción sustancial, es decir, que reduzcamos (objetos y fenómenos de) una categoría importante de la realidad a (objetos y fenómenos de) otra. No. Ni vamos a reducir lo mental a lo físico, ni lo asimétrico a lo simétrico, ni lo intensional a lo extensional, ni lo abstracto a lo concreto, ni lo plural a lo singular, etc. etc. Y aunque pudiéramos hacerlo, ¿qué ganariamos? Quienes se toman en serio a Benacerraff/Quine han de pensar que habremos ganado algo de claridad en nuestra imágen del mundo. Sin embargo, muchas veces, aquello a lo que se buscan reducir las cosas suele ser tan oscuro como aquello que se busca reducir. De cualquier manera, creo que hay mejores cosas por hacer s

¿Porqué pensar que sólo lo que existe es real?

Tradicionalmente suele pensarse que sólo lo que existe es real. Para muchos, es absurdo pensar de otra manera. Sin embargo, y tal vez por la misma razón, es difícil encontrar argumentos sustanciales a favor de esta tesis metafísica fundamental. En general, podemos identificar dos estrategias básica de respuesta: Lo inexistente no es parte de la realidad… porqué está de mas , es decir, una vez que hemos determinado todo lo que es y todo lo que existe, no queda más que decir: una vez que sabemos todo lo que existe, sabemos también que nada más existe. Porqué hay algo en lo existente que lo hace real (y que es necesario para que algo sea real y está ausente en lo inexistente). Desafortunadamente, hay problemas con ambas estrategias: Si bien hay un ejército de filósofos tratando de dar cuenta de qué tratan todos los enunciados negativos verdaderos apelando sólo a cosas que existen, el esfuerzo sigue siendo infructífero. Uno de los problemas fundamentales de esta estrategia ha